18 oct 2015

Guerra de los Cien Años: Introducción al conflicto

En los siguientes artículos trataré uno de los conflictos más longevos de la Historia, la Guerra de los Cien Años (1337-1453), un conflicto que pese a su nombre, duró 116 años. Esta larga guerra se dio entre Inglaterra y Francia y trajo enormes cambios, entre tantos otros, lo hoy denominado ‘profesión militar’. Durante este periodo se dio el cambio de ejércitos de milicias a permanentes y poco a poco más profesionalizados. Igualmente hubo importantes avances tecnológicos. Nos atendremos a la situación del inicio de la guerra.

Inglaterra y Francia en eterno conflicto

Las causas del inicio de la guerra son muy bien conocidas y estudiadas, por lo que lo que se presenta aquí es tan sólo un breve recuento de las mismas. Eran los reyes de Inglaterra, por herencia, propietarios de una extensión territorial mayor en el continente que el mismo rey de Francia, pero eventualmente esto cambiaría. Después de varias agresiones por parte del reino francés, quienes tenían como objetivo reclamar como suyos estos territorios, se firmó en 1259 la (normalmente denominada) fatídica Paz de París, despojando a Inglaterra de casi todas sus posesiones en Francia y dejando al rey galo el camino abierto para entrometerse en los asuntos del primero como su señor feudal. Se entiende a este asunto, claramente una disputa feudal, como la principal causa del estallido del conflicto en 1337, ya que el rey de Francia no se detuvo ahí, confiscó el ducado de Guyena en tres ocasiones, la última en 1337, empujando al monarca inglés a romper relaciones con París desde entonces y para el resto del siglo.


La segunda razón (eventualmente ligada a lo anterior) de más peso para el inicio de las confrontaciones bélicas es de corte dinástico. A la muerte de Felipe V de Francia, y sin ningún hijo hombre para heredar la corona. Sabemos bien que el rey de Inglaterra era uno, y Felipe de Valois otro. Con el nombramiento de este último en 1328 y eventual coronación un año después se sellaba el futuro de Francia; encontró muy poca resistencia, ya que ese mismo año, el rey inglés, como su vasallo, le rindió homenaje. Sin embargo, a raíz de las incursiones francesas en el ducado ingles de Guyena, Eduardo III se retracta del homenaje que otrora le hizo a Felipe de Valois y decide desde ese momento adoptar el título de ‘Rey de Inglaterra y de Francia’, remitiendo una vez más a su herencia materna y reclamando para sí lo que por derecho podría bien pertenecerle. En 1337, viéndose en dificultades para invadir Francia directamente, los primeros estallidos bélicos se dieron finalmente en Flandes.




 






















Fuente de la imagen: geacron.com 



No hay comentarios:

Publicar un comentario